Manipulaciones
Tenemos que entender que los perros son animales diferentes a nosotros, tienen un patrón de conducta distinto e incluso su cuerpo es distinto, eso nos obliga a aprender de ellos, entender cómo se comunican y cómo podemos adaptar nuestra forma de comunicarnos con ellos para que sea más efectiva.
Los perros no tienen manos con dedos prensiles (Que aprieten o agarran cosas), ¡Esta es una característica de nosotros, los primates! Por lo tanto, para ellos el tomar o agarrar del pellejo es más similar a una mordida (Porque sí pueden apretar con la boca).
Si nosotros miramos detalladamente qué le pasa a un perro cuando lo tomamos del pellejo, de las manos, o del hocico, veremos una serie de respuestas conductuales como el achicarse, alejarse, abrir más de la cuenta los ojos, que son señales sutiles de incomodidad
, no es algo que les guste. Si fuese un perro inseguro o miedoso tal vez podría llegar a gruñirme, mostrar dientes o tirar un mordisco al aire, que son señales de advertencia.
Si lo vemos desde el punto de vista conductual, podemos ver que tenemos formas de saludarnos completamente diferentes. Los perros son indirectos, al aproximarse se rodean, ofrecen el costado, se acercan lento y olfatean las glándulas anales (Parte posterior). Nosotros los humanos somos mucho más directos, nos miramos a los ojos, nos acercamos directamente, nos damos la mano, abrazamos o incluso besamos!. Estas conductas no son naturales en el perro pero nosotros amamos hacerlas y por esto debemos enseñarles (Entrenar) a nuestros perros para que puedan tolerarlas.
Debemos enseñar a nuestro cachorro a entender y tolerar las manipulaciones que hacemos por amor, pero también las que necesitamos hacer por cuidados. Ya sean veterinarios (Revisión, orejas, ojos, zona genital) o cuidados regulares que debemos hacer nosotros (Patas, uñas, boca).
Una vez más, el camino más largo es el mejor, porque así no generamos miedo en tu perro, que fácilmente puede convertirse en una acción defensiva. Tampoco va a destruir tu vínculo con él, ya que le van a encantar tus caricias!
Entrenaremos dos grupos de manipulaciones, las de revisión y cuidados veterinarios y también las de cariño y regaloneo. En ambos grupos usaremos dos técnicas iguales, contracondicionamiento y desensibilización. Esto quiere decir que cambiaremos la emoción desagradable o incómoda con una asociación a algo positivo como una comida rica (Contracondicionamiento) e iremos haciéndolo muy despacio, aumentando muy de a poco el nivel o intensidad de esas manipulaciones o caricias en la medida que el perro las tolere bien (Desensibilización).
Reglas:
- Siempre debe ser voluntario, si el perro no quiere, se rehúsa, se aleja o ves que no lo está disfrutando, debes disminuir la intensidad de esa manipulación.
- Siempre utilizaremos un premio de alto valor como comida rica (Lo siento, las caricias no necesariamente son un premio y menos de alto valor).
Debemos iniciar las manipulaciones desde la punta de la nariz, hacia la cola, revisando ambos costados del perro y con ambas manos (Muchos perros muerden la mano izquierda por que no están acostumbrados a que esa mano se les aproxime). Debemos revisar, nariz, boca (Abrir), ojos (Abrir levemente y mirar córnea y cristalino) orejas (Mirar adentro) cuello (Palpar), pecho, manos (Revisar uñas y entre dedos), abdomen (Palpar) piel en general, caderas (Palpar) piernas y patas (Revisar uñas y entre dedos), cola y levantar para revisar zona genital.
Daremos dos ejemplos, así no nos extenderemos demasiado, pero debe ser más o menos en ese ritmo cada una de las zonas mencionadas.
Ejemplo boca:
Solo avanzar al siguiente nivel si el perro tiene al menos 5 repeticiones seguidas sin rehusar, sin alejarse ni estresarse. Si sucediera cualquier cosa, retroceder al paso anterior o buscar un punto intermedio entre ambos pasos.
- Colocar mi mano bajo el mentón y que esté cómodo con eso.
- Con mi mano bajo el mentón, colocar mis dedos alrededor del hocico.
- Con mi mano bajo el mentón colocar mi otra mano sobre el hocico.
- Con ambas manos sobre el hocico, desplazamos levemente los labios con mis dedos para ver los dientes.
- Con mis dedos, levemente abrir la boca solo unos centímetros.
- Con mis dedos abrimos el hocico a la mitad.
- Con mis dedos abrimos el hocico completo.
Ejemplo Manos:
Solo avanzar al siguiente nivel, si el perro tiene al menos 5 repeticiones seguidas sin rehusar, sin alejarse ni estresarse. Si sucediera cualquier cosa, retroceder al paso anterior o buscar un punto intermedio entre ambos pasos.
- Colocar mi mano sobre su mano (No afirmar ni tomar)
- Colocar mis dedos alrededor de su mano.
- Deslizar suavemente mi mano bajo la suya (Sin levantar del suelo)
- Tomar suavemente su mano en la mía, levantándola del suelo.
- Tomar la mano y apretar un poco más firme (Sin que rehuse ni retire el la mano)
- Tomar la mano y separar sus dedos levemente.
- Tomar la mano, separar dedos, tocar uñas y zona interdigital.
Recién en este punto podríamos comenzar a sensibilizar el contacto de la tijera de uñas.
Luego en el grupo de manipulaciones que entrenaremos para regalonear podemos considerar el tocar la cara, besar, agarrar y también tomar en brazos. Daremos un ejemplo pero nuevamente, cada una de estas manipulaciones debe ser entrenada desde pequeño.
Ejemplo besos:
- Primero acostumbrar al perro a que podemos mirarlo fijamente a la cara (Esto ya para algunos cachorros sensibles es estresante)
- Aproximar nuestra cara, lentamente hasta unos 20 o 30 centímetros de la cara del perro.
- Incorporar lentamente el poder afirmar suavemente (Sin resistencia) la cara con ambas manos.
- Ir paulatinamente disminuyendo esta distancia en la medida que el cachorro nos muestre señales de calma.
- Una vez que ya podemos estar a centímetros, sin tener que afirmar la cara para que evite nuestro beso, podemos finalmente dar un beso y liberar al cachorro.
Es importante mencionar que existen dos tipos de caricias y que es crucial entender qué efecto tienen en nuestros cachorros. Las caricias que son discontinuas en la piel, a contra pelo, tipo rascar o golpetear van a producir una sensación de electricidad y nervio en los perros, por lo tanto, va a elevar los niveles de excitación. Las caricias que son en el sentido del pelo, con una presión moderada (No muy liviana pero sin generar incomodidad) desde el cuello hasta la cadera (Evitando tocar la cola) con un movimiento lento y continuo generan calma y relajan. Puede ser que tu perro no esté acostumbrado en un comienzo a estas caricias, pero poco a poco va a relajándose mientras nosotros también mantengamos una actitud calmada.
Siempre recomendamos evaluar si nuestro perro está disfrutando una manipulación o interacción. ¿Cómo hacemos esto? siempre debemos dar la elección al perro de escoger si quiere más o no de lo que estemos ofreciendo (Un cariño en la cabeza, una rascada de panza o un abrazo). Si le estoy rascando la cabeza, debo dejar de hacerlo, retroceder un paso y si él viene a mi sin tener que llamarlo es que quiere más. Si lo piensa, mmmm no estoy tan seguro de que quiera más cariño. Siempre debemos evaluar si nuestro perro está cómodo observando las señales de calma. Si rehúsa o trata de retirarse y también si es que quiere más o está bien con la cuota del día.